Caminando por una ruidosa y transitada calle de Ñuñoa, pude divisar una pequeña pizarra escrita con tiza “Ristorante artesanal italiano”, la curiosidad no pudo conmigo y decidí entrar. Un pasillo eterno, empapelado con fotos en blanco y negro de artistas de cine de los 60 me daban la bienvenida. Al llegar al final del pasillo, el sitio me sorprendió: un parrón gigante envolvía la mitad de las mesas mientras el resto brillaba con la luz de las velas. La música italiana sonaba sin parar y con ella me vi envuelta en un lugar de cuento.
Buscar un espacio para desconectarse fue la idea principal que tuvieron los cuatro socios que decidieron formar “La Finestra”, ofrecer un momento de relajo para los comensales y demostrar que la buena gastronomía no siempre debe ir ligada a una mesa de mantel largo y a una seria velada.
Presentando exquisitos platos italianos, nacionalidad de uno de sus dueños, La Finestra nos deleita y sorprende, spaghetti carbonara, ravioli di grancho, gnocchi al pesto di rucola y las infaltables pizzas son sólo algunos de los platos que este exquisito restorán nos presenta, todos preparados con ingredientes cosechados en su propio huerto.
El propósito de los propietarios se cumple al pie de la letra, al entrar en este encantado lugar es imposible no olvidarse de la gran ciudad que nos espera afuera, nos transportamos directamente a la Toscana, sus platos y excelente atención no hacen más que aportar a una excelente velada.
Dirección: Avenida Irarrázaval 3465, Ñuñoa- 23415389