Hace unos días que tenía ganas de comer un queque tal cual me quedo el de la receta, al leer mis próximas palabras creerán que estoy media loca, pero buscaba un queque con textura suave, que fuese de masa compacta (no aireada) y que a la vez no estuviese seco, ósea un queque húmedo. Guau! Muchas características para un simple queque. El que hago normalmente las tiene casi todas, pero me parece que es demasiado aireado y yo quería algo más compacto. En fin, luego de probar varias recetas, llegue a esta que me encanto y logró cumplir con todos mis requisitos, se las dejo.
Ingredientes
125gramos de mantequilla cortada en cubos
1 taza de azúcar
2 huevos
1 ½ taza de harina sin polvos de hornear
1 cucharadita de polvos de hornear
1 cucharadita de esencia de vainilla
½ taza de leche de almendras
¼ taza de almendras picadas
½ taza de arándanos
Preparación
Pre calentar el horno a 180°C
En un bowl batir la mantequilla y el azúcar, hasta obtener una mezcla cremosa, incorporar los huevos y volver a batir. Sumar la harina, los polvos de hornear, la leche y la vainilla. Batir una vez más hasta que la mezcla no tenga grumos.
Incorporar a la mezcla la mitad de los arándanos, mezclar con un mezquino.
Disponer la mezcla en un molde rectangular enmantequillado de aproximadamente 20 x 10 centímetros, espolvorear sobre este las almendras y la otra mitad de los arándanos. Hornear a 180°C durante 50 minutos o hasta que al introducir un palillo en el centro del queque este salga seco, dejar enfriar y servir.